A través del Decreto 1002/99 se declaró a los servicios privados de seguridad y custodia como una actividad subsidiaria de la que presta el Estado, por lo tanto, y como trabajadores del sector de la seguridad, vemos con gran preocupación el conflicto generado en las últimas horas entre el gobierno de la provincia de Buenos Aires e integrantes de la Policía Bonaerense.
Nosotros consideramos a la actividad policial como esencial y así quedó demostrado en la labor fundamental que llevaron adelante durante la pandemia.
Al mismo tiempo, entendemos que los trabajadores policiales deben ser reconocidos y dignificados a través, entre otros puntos, de una sustancial mejora salarial, e incluso apoyamos la implementación de un sistema de representación profesional, por fuera de lo establecido por la Ley 23.551, ya que en nuestro país está prohibida la sindicalización policial.
No obstante, no podemos convalidar la actitud de determinados integrantes de esta fuerza que en declaraciones recientes han amenazado con intensificar las protestas si no hay acuerdo con el Ejecutivo provincial. Esa postura configura una clara amenaza a la gobernabilidad, y jamás vamos a estar de acuerdo con ello.
Apoyamos la gobernabilidad e instamos a respetar la elección de la mayoría del pueblo que eligió a Axel Kicillof para conducir los destinos de la Provincia de Buenos Aires y ninguna fuerza puede ir en contra de la voluntad popular.
Pedimos que reine la cordura y se avance en un pronto entendimiento. Por el bien de nuestra democracia y de los bonaerenses en su conjunto.
